El Delincuente
Hoy día muchos padres, buscan deslindarse del compromiso, responsabilizando a los maestros de escuelas, a los lideres de las iglesias a educar moral, y espiritualmente a sus hijos. Si los hijos salen mal, no es culpa de los padres, sino de los educadores, este es el pensamiento que está destruyendo varios hogares y sociedades del mundo entero. Pero la realidad es. que los hijos no pueden ser diferentes de lo que están aprendiendo en la casa, porque este es su lugar de modelo.
Esto se puede ver en la historia de un preso condenado a muerte, en su último deseo. A pocas horas en su celda, esperando ser ejecutado, pidió como último deseo papel y lápiz. Luego de escribir por varios minutos, le dijo a su custodio por favor, entregue esta carta a mi madre!! La carta decía así:
Madre, creo que si hubiera más justicia en este mundo, tanto tú como yo deberíamos de ser ejecutados. ¡Tú eres tan culpable como yo de mi miserable vida! ¿Te acuerdas madre, cuando llevé a la casa aquella bicicleta que le quité a otro niño igual que yo? Me ayudaste a esconderla para que mi padre no se enterara. ¿Te acuerdas madre, cuando me robé el dinero de la cartera de la vecina? Fuiste conmigo al centro comercial y lo gastamos juntos. ¿Te acuerdas madre, cuando le echaste a mi padre de la casa? Él sólo quiso corregir me, por haberme robado el examen final de mi grado y a consecuencia me expulsaron.
Madre, yo era sólo un niño, luego fui adolescente y ahora un hombre mal formado! Era sólo un niño inocente que necesitaba corrección, y no consentimiento. Te perdono, y sólo te pido que le hagas llegar esta reflexión a todos los padres del mundo, que sepan que ellos son los únicos responsables de formar, a un hombre decente, o a un vulgar delincuente. Gracias madre por darme la vida y gracias también por ayudarme a perder la. Firma ¡Tu hijo, El Delincuente!
Para que no tengamos hijos delincuentes, debemos disciplinarlos, enseñarles con principios de Dios que está en la Biblia, es la buena recomendación del rey Salomón en Proverbios 22:6 Enseña al niño el camino en que debe andar, y aun cuando sea viejo no se apartará de él. Esta enseñanza marcará el camino al hijo, es lo que escuchábamos en la historia. Además como padre no debemos de rehusar corregir al muchacho; porque si lo castigas con vara, no morirá.” Proverbios 23:13-14.
La disciplina se utiliza para corregir y guiar a la gente por el camino correcto, en Hebreos 12:11, encontramos; “Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados”. La disciplina de Dios es amorosa, como debe ser entre el padre y el hijo.
¿Que enseñanza le esta dando a tus hijos? ¿Que clase de hijo estas criando, uno que va ser un buen ciudadano o un delincuente? Pide ayuda a Dios en oración, Padre Celestial, gracias por la gran responsabilidad que tenemos como padres, de educar a nuestros hijos de acuerdo a tus principios, te pido que nos ayudes a llevar en cuenta tu palabra para criar un buen ciudadano y un buen siervo o sierva para ti, amen.