Los parásitos son seres que viven a expensas de sus semejantes, infectan el cuerpo de su huésped, que muchas veces los recibe sin darse cuenta. Su único objetivo es alimentarse de lo que produce el cuerpo de su victima. Debilita al organismo anfitrión quitándole los recursos que este consume o produce. Su objetivo principal es mantenerse a costa del anfitrión aún si esto representa la muerte del mismo, explota a la victima hasta matarla.

El parásito no se preocupa por buscar por si mismo el sustento, espera y cree muy firmemente que es su derecho que el organismo anfitrión ceda todo lo que es en pos de mantenerlo y saciar su voracidad. El parásito devora a su victima lentamente, casi sin que esta lo perciba hasta que es muy tarde.

En un grupo de personas, puede ser familia, trabajo, iglesia, instituciones educativa o en la sociedad donde personas se relacionan existen también los parásitos que destruyen las relaciones buenas, comen y debilitan la armonía entre las personas. Identificar no será una tarea fácil, pero el apóstol Pablo escribe en Colosenses 3:5ss, las siguientes palabras para ayudarnos a identificar algunos parásitos: 5 Por tanto, hagan morir todo lo que es propio de la naturaleza terrenal: inmoralidad sexual, impureza, bajas pasiones, malos deseos y avaricia, la cual es idolatría…8 Pero ahora abandonen también todo esto: enojo, ira, malicia, calumnia y lenguaje obsceno. 9 Dejen de mentirse unos a otros…

Según este texto, los parásitos que destruyen a las personas y una relación armónica entre estas, podemos notar en primer lugar en el verso 5 varios tipos, pero que se resume en una sola palabra que es el pecado. Muchas veces son escondidos, sin poder ser visualizado a simple vista, pero carcomen a sus victimas hasta producirla una muerte espiritual, y en algunos de los casos la muerte física (Santiago 1:15).

En los versos 8 y 9 Pablo cita otro grupo de parásitos, que son: el enojo, la ira, malicia, calumnia o falso testimonio, palabras groseras, y también la mentira. Teniendo estos en la relación interpersonal, esta no prosperará y de hecho es urgente que se encuentre algunos antiparasitarios para desparacitar la relación infectadas.

Desde el verso 12 al 14, encontramos algunos antiparasitarios que son, la bondad, humildad, amabilidad y paciencia, soportar unos a otros, perdonarse mutuamente y vestirse de amor, que es el vínculo perfecto. Si estas cosas reinan en la familia, y en cualquier grupo donde haya relación interpersonal los parásitos serán destruidos, la alegría, la armonía y felicidad reinaran.

¿Como está tu vida con los parásitos, puede identificar cuales son? ¿identificarías otro parásito que te está destruyendo a ti personalmente y a los otros quienes te rodean? Quiero ayudarte a buscar ayuda en Dios, diciendo: amado Señor se que tu estas escuchando este clamor, en donde pronuncio un arrepentimiento ante ti y que me libres de los parásitos destructivos, te entrego a ti y te pido que me ayude de ser fuerte, y cada día yo pueda tener en cuenta en mi vida y en mi trato con los otros los antiparasitarios que me enseñaste hoy, en tu santo nombre, amén.