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Salir del circulo

En cierta ocasión habían atado a un elefante con una cadena por una de sus patas. Por muchos años el animal caminaba haciendo un circulo hasta donde llegaba el extremo de la cadena.

Un día el dueño decidió’ quitarle la cadena y le puso la comida mas allá de aquel circulo. El Elefante lanzaba balidos de hambre y de ira pero no traspaso’ su antiguo limite aunque podía haberlo hecho.

Es así que en este mundo muchas personas han sido atados por hábitos indeseables, como por ejemplo: los vicios al alcohol, cigarrillos, y todos tipos de drogas, algunos han sidos atados por las mentiras, robos, pornografía y otros pecados sexuales, entre otros. Luego se han entregado a Cristo quien los ha libertado de todo mal camino, pero muchos cristianos siguen andando, caminando, dentro de su circulo de malos hábitos en lugar de disfrutar de la libertad que Cristo les ha dado, en Juan 8:36 dice; si el Hijo os hace libres, seréis realmente libres.

Mis queridos amigos para ser libre completamente por medio Cristo Jesús, es importante reconocer cuales son estos malos hábitos, que me están sirviendo de tropiezo en mi crecimiento espiritual. Luego refugiarse y permanecer en Cristo para que de esta manera puedas ganar fuerza de superar los hábitos indeseables, el propio Jesús dijo en Juan 15:4-5: Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. 5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.

Además de permanecer en Cristo y la palabra de Dios, es recomendable también tener un autodominio, para decir no a los malos hábitos que desean volver, Pablo escribió en 2 Timoteo 1:7; que Dios no nos ha dado espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. Dios espera que tomes la decisión cada día, que le entregues tu vida y tu voluntad a Él, que ore mencionando que no puedes solo, elijas cada momento no entrar devuelta al circulo, y pida al Señor que te de sus fuerzas para seguir adelante.

¿Identificas cuales son tus hábitos indeseables? ¿Permitirías que Cristo te libere? Ora a Dios, amado Señor se que tu me escuchas, y te suplico que quites de mi cualquier hábitos que no esta acorde a tu voluntad y que me dificultan seguir creciendo en mi vida espiritual, dejando fuerza del gozo que tu me ofreces, por medio de esa libertad en la persona de tu hijo Jesús, amen.