Cuenta una historia de una persona creyente rebosante de alegría. Por desdicha las cosas cambiaron. Ella dice que aún lee la Biblia, pero sin interés y casi siempre los mismos versículos. Pero en realidad se hallaba en un estado de estancamiento y decepciones, a pesar de esto, aspira a llegar a ser un cristiano adulto, equilibrado en su fe. Tal vez conoce a alguien así, o tu mismo te encuentras en esta situación?

Muchas veces escuchamos o hablamos cuando se comete un pecado en el ámbito cristiano “me caí”. Pero la pregunta es ¿Cómo evitamos caer? Al crecer y edificarnos en el Señor. Los «niños recién nacidos», necesitan alimentarse, sino están inestable, lloriquean, una madre sabe bien de lo que estoy diciendo, si el niño no se alimenta bien, no va crecer, y en el cristiano recién nacido también sucede esto, necesitan bajarse de la cuna y empezar a caminar, y si no se alimentan de la Palabra del Señor y de la oración, son inestables y no crecen espiritualmente. En este mundo perverso los cristianos debemos dedicar tiempo a nutrirnos de las promesas de Dios que encontramos en la Biblia, debemos orar y ayuna, de esta forma estaremos ejercitando nuestros músculos espirituales.

Si miramos en los escritos del Apóstol Pedro, podemos observar que en su primera carta se centra en el tema de la gracia, en la segunda carta fue conocimiento; el autor resume ambas cartas exhortándolos a crecer en la gracia y en el conocimiento. Este conocimiento no es sólo el de la Biblia; es el de Cristo mediante la Biblia. En 2 Pedro 3:18 está claro el mensaje; ¹⁸Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.

Desafortunadamente, es posible crecer en el conocimiento, tener la verdad bíblica en la cabeza y jamás crecer en la gracia, esto significa mostrar la verdad bíblica en nuestras vidas. Dios por medio de Pedro quiere que tengamos vidas equilibradas, debemos aprender y vivir la Palabra. Debemos llegar a conocerle mejor a Cristo, como dice Filipenses 3:10. Necesitamos una visión más amplia y profunda de Jesucristo y para esto la Biblia nos da un glorioso retrato de él. Entonces, por medio del Espíritu Santo, podemos contemplarle y encontrarle como una persona viva que nos llena de gozo con su presencia.

Otra cosa que nos ayudaría a crecer es, reconocer nuestros errores, humillarnos, si fallamos o hablamos mal contra alguien, es importante acercarnos y pedir perdón para que de esa forma seamos perdonado, sino esa falla o esa relación rota que hay en nuestra vida nos sirve como un muro de impedimento para crecer.

¿Como estas en tu vida espiritual, creciendo o vives en un tiempo de estancamiento? Busques el crecimiento para evitar la caída. Te invito a orar a Dios, mi buen Señor, Gracias por la gracia y el conocimiento que tu me has otorgado, y ayúdame a crecer en estos cada día, amén.